No es lo mismo ver los datos en un .pdf que en una tabla en .csv. No es igual el modelo de desglose presupuestario que usan un ayuntamiento y un ente autonómico. Y partidas como “protección social” o “amortización de la deuda pública” no incluyen los mismos conceptos en todas las administraciones.

No es fácil hacer un seguimiento de la información presupuestaria y comprender con claridad cómo se ejecuta el gasto público en cada uno de los niveles de la administración. En Civio lo sabemos. Hemos sufrido la dificultad añadida que supone la diversidad de modelos presupuestarios cuando hemos colaborado con distintos gobiernos autonómicos. Para facilitar la consulta del gasto de la Administración Central estamos trabajando en mejoras muy importantes en nuestra web ¿Dónde van mis impuestos?, que pronto anunciaremos. Y también permanecemos atentos a las medidas que adoptan otros países para mejorar la transparencia presupuestaria y llevar a cabo una rendición de cuentas efectiva. Y en este punto, Estados Unidos ha dado un valioso paso adelante que aquí no debería pasar desapercibido.

Hace pocas semanas Obama rubricó, tras pasar por las cámaras, la aprobación de la DATA Act (Digital Accountability and Transparency Act), una iniciativa por la transparencia presupuestaria que supone “la divulgación de los gastos directos de todas las agencias federales y la conexión de toda la información sobre contratos, préstamos, ayudas adjudicadas y gasto en programas federales para permitir a los contribuyentes y responsables políticos hacer un seguimiento más eficaz del gasto”. Así, en adelante, todas las agencias federales deberán facilitar sus datos públicamente en _USASpending._gov y siempre en formatos comunes para todos los niveles de la administración federal.

Esta medida, además, supondrá la homogeneización de la nomenclatura de todos los reportes de gasto. Cualquier ciudadano, la sociedad civil o un regulador podrán seguir de una agencia a otra, o de un departamento a otro, una determinada partida o un tipo de gasto sin perder exactitud o dudar si una partida se mide según un baremo u otro diferente. Además de fortalecer la rendición de cuentas, se espera también una mayor eficiencia en los procedimientos administrativos, la reducción de gastos y la aplicación de controles contra el fraude con fondos públicos.

Por su interés, reproducimos algunos extractos de información reciente sobre esta nueva norma:

La DATA Act es sin duda el primer proyecto de ley de datos abiertos que asciende a rango de ley en los Estados Unidos. […] Fue aprobada sin objeciones tanto por la Cámara de Representantes del Congreso como por el Senado, lo que demuestra que la transparencia de los datos económicos no es un asunto partidista.

La DATA Act toma un modelo de datos estructurado que ha traído una rendición de cuentas sin precedentes a los gastos de estímulo económico y lo aplica a todos los dominios del gasto federal”, dice el director ejecutivo de la Data Transparency Coalition, Hudson Hollister, quien ayudó a redactar la versión inicial en 2011”. La DATA Act convertirá la información del gasto federal en datos abiertos de gasto (open spending data), un nuevo y valioso recurso público que fortalece la rendición de cuentas democrática e incentiva la innovación”. The DATA Act just passed the Senate. Here’s why that matters – The Washington Post

La Sunlight Foundation considera éste el primer paso para transformar cómo se informa sobre el gasto público federal, y confía en que la buena aplicación de esta ley, donde se juega todo, sea proporcional al entusiasmo de la sociedad civil.

¿Pero es un caso único? Quizá se trate del primer impulso que se estructura a través de una ley única, pero Júlia Keserű (International Policy Manager de la Sunlight Fundation) recuerda que otros países también han hecho sus deberes y avanzado para homogeneizar la información presupuestaria. Por ejemplo:

Brasil

a las agencias gubernamentales del país más grande de América Latina se les exige publicar en Internet sus datos financieros en formatos procesables por ordenador y a diario en su Portal de Transparencia desde 2004. Contiene abundante información en detalle y actualizada sobre los ingresos y gastos del gobierno, procesos de contratación y transferencias federales a municipios, estados e individuos […] Las partidas presupuestarias contienen tanto los nombres oficiales como los nombres populares de las iniciativas, por lo que el portal es usado masivamente por los medios, los funcionarios públicos y los ciudadanos”.

Reino Unido

Además de publicar información granular sobre el gasto y parte de los contratos del gobierno central y los cuerpos locales, Data.gov.uk también presenta información sobre la mayoría de los funcionarios senior, incluyendo su escala salarial. En lugar de una ley única, el régimen de transparencia económica británico es una mezcla de códigos de conducta, políticas, enmiendas a la ley de transparencia y experimentos gubernamentales”.

Corea del Sur

El Sistema de Gestión Presupuestaria contiene información en tiempo real sobre el presupuesto y su ejecución, datos sobre contratación pública y una sección donde el gobierno central, autoridades locales, instituciones públicas y la sociedad pueden conjuntamente decidir a dónde se adjudican los recursos. Como extra, los ciudadanos pueden informar de supuestas apropiaciones indebidas de fondos estatales e incluso obtener una recompensa de 30.000 dólares si las alegaciones se resuelven como ciertas”.

México

En 2008 el gobierno mexicano propuso un esfuerzo similar pasando la Ley General de Cuentas Públicas, que trataba de establecer principios comunes para entidades públicas a nivel federal, estatal y municipal, y les exigía registrar y facilitar la información del gasto usando los mismos estándares. La aplicación aún no es perfecta y la implementación varías entre las diferentes agencias, pero gracias a las enmiendas de 2012, hechas para mejorar su cumplimiento, se han producido mejoras en cómo los cuerpos públicos proporcionan los datos, según informan entidades de seguimiento locales.

Viendo cómo otros países avanzan en la dirección de unificar criterios para facilitar la información presupuestaria, y considerando el retraso que ya acarrea España en la aplicación de una transparencia efectiva, ¿no supondría reproducir desde ahora los mecanismos más básicos de la DATA Act un ahorro importante de tiempo y costes que algún día, más adelante, tendremos que acabar pagando?